«Las Mariposas de Mictlán».

«El futuro es una ilusión tecnológica,
el presente una verdad en constante lucha,
el pasado es la raíz de nuestras acciones.
Nuestro peso no es en kilos, es en gramos de buenas acciones».

La divinidad de la mujer serpiente de nuestras bellas raíces «Coatlicue» nos muestra la verdadera esencia del poder femenino. Contrario a lo que el ser humano filósofo y erudito define en ellas, la amargura de su corazón es igual a la falta de grados de calor de aquellas almas libres del martirio de seguir las leyes de la iglesia…

«Los secretos del mar»

En tu presencia fui la eternidad,
pero lejos de ti amado mar,
soy un simple pedazo de tiempo,
flotando en la inmensidad del universo.

Entre la verdad y la mentira, entre el poder y la sumisión, siempre existirá un rayo de luz llamado «voluntad».

«La soledad del invierno»

«Y si el frío congela tus manos,
descubre tus alas para volar,
entre la niebla y la soledad».

Era la estación preferida para los amantes del frío y la soledad, eran momentos por fin de tranquilidad y después de tantos días de calor y lluvia, llegaban los días de felicidad.

«El árbol inmortal»

«En medio de desiertos, ríos, lagos, montañas, hielo…
siempre existirá el deseo de vivir».

Una mañana hermosa en algún lugar de la Tierra vivía un árbol especial, que todo mundo ignoraba, aquél árbol vivía aislado, lejos de los humanos e inclusive los animales no se acercaban en lo más mínimo a la sombra generada por los ramas llenas de hojas verdes que abundaban entre sus ramas. 

«La escultura de Dios II» (Eva, la serpiente y Adán)

«Eres luz, eres vida, eres amor, eres poesía…».

La muerte no es impedimento para dejar de quererte, una vida no es suficiente para describir la maravillosa creación de Dios…